Si bien las mujeres tienen la rutina de ir al ginecólogo y suelen controlar su salud reproductiva con mayor disciplina, no sucede lo mismo con los hombres.
En muchos casos los hombres, ni siquiera conocen la especialidad a la que deben recurrir.
Sobre por qué los hombres consultan tan poco a los especialistas en su aparato genital, opinó el Dr. Gastón Rey Valzacchi.
El doctor es especialista en Medicina Reproductiva y Andrología, director médico de Procrearte y jefe de la sección Andrología y Reproducción del Servicio de Urología del Hospital Italiano.
Existen fuertes evidencias de que los hombres suelen ocuparse poco de su salud.
Si bien la expectativa de vida de la población ha aumentado, la misma es marcadamente mayor para las mujeres que para los hombres.
Esto se debe en parte a cuestiones genéticas y sociales, pero claramente el cuidado que dedica a su salud cada uno de ellos es muy diferente.
Las mujeres suelen tener a su ginecólogo/a como médico referente; los hombres no saben exactamente a quien consultar.
Esta es una razón que lleva a que los hombres no consulten o lo hacen varios años después que aparecen los síntomas. Y muchas veces lo hacen en lugares que se publicitan en medios sin mucho aval científico.
Sin embargo existen otros factores que se relacionan con la construcción de la masculinidad (rol).
La cual suele dar herramientas no muy saludables ya que los paradigmas de la misma son:
• Que los hombres son el sexo fuerte y deben aguantar (los hombres no lloran).
•Una falta de conciencia del hombre del riesgo de enfermedad (a mí no me va a pasar).
• Un retardo o dificultad en la consulta.
•Y el concepto que tienen muchos hombres que suelen considerar que el cuidado es una cuestión de las mujeres.
Todo esto hace que el hombre no suele consultar y los estudios muestran que hasta los 75 años las mujeres consultan al médico generalista el doble de veces que lo hace el hombre.
Asimismo, como otros ejemplos que pueden justificar la diferencia en la expectativa de vida entre hombres y mujeres además de la falta de control médico.
Es que comparativamente los hombres respecto a las mujeres tienen un grado significativamente mayor de consumo de alcohol, de cigarrillo. Y de drogas ilícitas entre otros aspectos conductuales.
A fin de mejorar esta situación las estrategias se deben basar en los siguientes puntos:
– Formación de programas nacionales y de organismos relacionados con el área.
En países con buen desarrollo en el área de salud suele haber programas gubernamentales orientados a la atención de los problemas masculinos, no existiendo esto en nuestro país.
– Información para los hombres sobre estos aspectos y el cuidado de la salud.
Además de los organismos nacionales, en otros países hay propuestas de organismos no gubernamentales que se encargan de difundir distintos aspectos de la salud masculina.
Algunos ejemplos son Andrology Australia, un programa de educación para los profesionales y la comunidad para proveer información sobre salud masculina.
(www.andrologyaustralia.org) y The Movember Foundation (contracción en inglés de Moustache bigote y November noviembre).
Un evento anual en el que los varones dejan crecer su bigote durante el mes de noviembre y se organizan encuentros con la intención de concientizar sobre temas de salud del hombre.
Tales como cáncer de próstata, cáncer de testículo, depresión masculina y similares.
Y recaudar dinero para ayudar en cada país a una o más instituciones dedicadas a luchar contra dichos problemas de la salud masculina.
– Formación de profesionales para la atención específica de estos problemas.
La Andrología puede definirse como el área de la medicina dedicada al estudio de las funciones y las enfermedades específicas del hombre, especialmente aquellas relacionados con el aparato reproductivo.
Siempre se ha dicho que es el equivalente de la ginecología para la mujer. En la Argentina existe un único programa formal de formación profesional en éste área.
– Desarrollo de Programas/Consultorios de Salud Masculina.
Un estudio reciente de los 50 mejores hospitales de los Estados Unidos mostró que solo el 32% de ellos presenta algún centro orientado a la Salud Masculina.
A diferencia del 98% que tiene algo relacionado con la salud femenina.
Un Centro del Varón es útil para que todos los hombres tengan un lugar de referencia que pueda centralizar la atención de los problemas que pueden ocurrir en un hombre por su condición de tal.
El Centro del Varón debería estar constituido por un grupo multidisciplinario (urólogos, endocrinólogos, sexólogo, cardiólogo, nutricionista, diagnóstico por imágenes).
Que se dedican a:
• Atención de afecciones masculinas
• Formación de profesionales en esta área
• Educación de la población sobre temas relevantes que afecten a los hombres
• Investigación sobre salud masculina
Si bien se han logrado avances en muchos campos de la salud masculina, como la necesidad de control prostático regular.
Y de las existencia de nuevas posibilidades de tratamiento como son medicaciones para la disfunción eréctil, la andropausia, la disfunción eyaculatoria, etc. Se requiere una visión y un enfoque más integral que aborde los problemas de la salud del hombre.
Por Gastón Rey Valzacchi, jefe de Andrología y Reproducción del Centro del Varón del Hospital Italiano de Buenos Aires.
Fuente: www.telam.com.ar