1 -¿Es el azúcar un alimento?
– Podríamos decir que no, o que sí y no. El término «alimento» viene de su raíz del latín «aquello que ayuda a crecer, nutrir».
Prácticamente, el azúcar como tal va a ayudar a dar energía de una manera rápida porque se puede quemar y producir energía.
Si estamos hablando del azúcar que se transforma en glucosa en nuestra sangre y que entra a la célula. El problema es que en nuestro cuerpo las cosas no funcionan tan simplemente. Y por lo tanto si consideramos al alimento como algo que nos hace crecer.
Entonces tenemos que contestar que el azúcar no es un alimento porque verdaderamente no está estructurando nuestro cuerpo.
Es importante hacer la diferencia porque cuando hablamos de sustancias que nos dan energía y que al mismo tiempo nos pueden ayudar a crecer ahí tenemos que hablar precisamente de las grasas.
El azúcar puede ser un arma de doble filo.
Por un lado, nos aporta calorías rápidas, es decir nos da energía, pero por el otro, no produce ninguna estructura, es decir no nos hace crecer.
Hay casos de desnutrición que pueden estar dados en personas que solo comen azúcar o los almidones que se transformarán en azúcar. Esto les da energía para sobrevivir, pero no pueden crecer ni desarrollarse. Los niños especialmente, porque les falta grasas, proteínas, minerales y vitaminas para su crecimiento.
Ese tipo de desnutrición se llama kwashiorkor.
Desde ese punto de vista, el azúcar no es un alimento.
Las grasas sí ayudan a producir energía y nos pueden ayudar a crecer y también estructuran nuestro cuerpo y el azúcar no; solo produce un tipo de energía rápida o sencillamente se almacena como grasa. Podemos entonces vivir sin el azúcar.
2- ¿Cuál azúcar es más perjudicial y cuál más saludable?
– Hay muchos tipos en la industria. Se ofrece el azúcar mascabo, directamente el azúcar de la caña sin ningún tratamiento industrializado. El azúcar de la remolacha, o distintos tipos de este producto que pueden ser la glucosa directa en la miel de abejas o del maíz que es el «Kero».
Podríamos decir que las más saludables o menos nocivas serían las más naturales. Como la miel orgánica que sale de las abejas o el azúcar natural que sale de la caña de azúcar sin industrializar.
La diferencia con la industrializada es que tiene los aditamentos de minerales y vitaminas que provee directamente la naturaleza acompañando a la planta. Y cuando el azúcar está blanca y cristalina estos nutrientes, minerales y vitaminas no los tienen.
Igualmente hay que aclarar, que hasta la mejor miel orgánica o el azúcar de caña como la naturaleza nos la entrega.
Dependiendo de cada organismo, puede ser nocivo porque todas ellas van a producir una forma rápida de energía. Que además luego se almacena como grasa y colabora fuertemente con la obesidad.
Si tenemos que indicarlas, las indicamos, especialmente en primer término el azúcar mascabo, es decir, un azúcar orgánica, el resto queda completamente afuera.
3- ¿Por qué se añade azúcar a los alimentos?
– Las investigadoras Goldfein y Slavin, en un artículo titulado Why Sugar Is Added to Food. Consideran que incluir en el etiquetado de los alimentos si contienen azúcares añadidos, no tiene un beneficio claro para los consumidores. Ya que puede usarse azúcar en otros procesos de preparación y envasado sin especificarse en las etiquetas.
Eliminar el azúcar refinado de nuestra dieta no es tan sencillo: hay muchas más comidas que contienen azúcares añadidos de las que creemos. Según las investigadoras, este ingrediente no sirve sólo para endulzar la comida:
* Da color: un conjunto de reacciones químicas aporta además de un sabor dulce, un color dorado a los alimentos.
Por ejemplo la caramelización el azúcar es fundamental para salsas, dulces, panes, mermeladas o licores de postre.
* Textura: el azúcar proporciona volumen a los alimentos y esto influye en las sensaciones que se producen en la boca al consumirlos.
* Fermentación: es común añadir azúcar en la elaboración de muchos productos de alimentos y bebidas como el yogur, el vinagre, el vino o la cerveza.
* Conservación: juega un papel crucial en la reducción de agua en algunos alimentos, manteniendo así los productos en buen estado durante más tiempo. En alimentos horneados ayuda a que no se sequen o se pongan rancios.
* Da sabor: y tiene una impresionante capacidad adictiva.
Finalmente, los nombres del azúcar son tantos que la tarea es muy complicada. Jugo de caña, miel de caña, miel de maíz, jarabe de maíz de alta fructosa, azúcar de repostería, azúcar moreno. Dextrosa, fructosa, glucosa, sacarosa, maltosa, lactosa, concentrados de jugos de frutas, miel y tantas otras más.
4- ¿Qué engorda más, la grasa o el azúcar?
– Muchos consideran que el principal enemigo para nuestra salud es el azúcar. Pero para otros, son las grasas saturadas presentes en la mayoría de los alimentos.
¿Qué es peor? ¿La grasa o el azúcar?
Cuando comemos grasa sola no se produce el estímulo de la única hormona necesaria para sintetizar grasa en el cuerpo. En cambio, cuando comemos azúcar, o sus derivados, es decir cualquier cosa que termine transformándose en azúcar en sangre. Si se estimula la salida de la insulina. Que es la única hormona que va a originar toda una serie de mecanismos por los cuales se va a terminar sintetizando grasa en nuestro cuerpo.
Cuando comemos grasa, la insulina se mantiene en reposo y el mecanismo que se origina justamente es el contrario a cuando comemos azúcar. Lo que ocurre al estar la insulina en reposo es que la grasa que comemos, y la que tenemos en nuestro cuerpo se va degradando como fuente de energía.
El misterio está en no consumir azúcar o las cosas que producen el aumento de azúcar en sangre. Para que no se sintetice la grasa en nuestro cuerpo porque la insulina está dormida.
Por ejemplo, cuando comemos una palta, cuando comemos nueces solas, sin el agregado del azúcar, lo que va a ocurrir es que sirven como fuente de energía.
Conocemos como azúcar a la sacarosa que es un producto industrializado. Que en realidad tiene muy pocos elementos que ha conservado de la naturaleza que es el originado de la caña de azúcar y de la remolacha.
Luego la industria se encarga de hacer muchos pasos químicos hasta que quedan unos cristales con conservantes y blanqueadores. Estos están formados por un disacárido (sacarosa) formado por glucosa y fructosa
Fuente: www.laprensa.com.ar
